En estos tiempos, el uso del celular está generando grandes transformaciones en diversos ámbitos de la vida, sobre todo, en la de los pequeños. USO DE CELULAR Y NIÑOS: CONSEJOS PARA EVITAR LA DEPENDENCIA.
Por ello, es muy importante que los padres de familia regulen su uso y promuevan que sus hijos jueguen al aire libre y realicen actividades físicas y grupales para que no abusen de la tecnología y desarrollen sus habilidades intelectuales, sociales, emocionales y motrices en forma adecuada.
CONSEJOS PARA EVITAR LA DEPENDENCIA
La pediatra Jessica Alvarez de la Clínica Ricardo Palma explica que la Organización Mundial de la Salud recomienda que los niños menores de 2 años deben mantenerse alejados de cualquier tipo de pantalla (celular, tableta o laptop). Los más grandes entre 2 y 5 años pueden pasar como máximo 30 minutos al día frente al computador siempre en compañía de un adulto, y los de 6 a 12 años pueden pasar entre 1 y 2 horas jugando con la tableta o teléfono inteligente.
Para evitar
Que los pequeñines pasen horas ‘pegados’ al celular, la especialista recomienda a los papás:
- Administrar y regular el uso de los dispositivos electrónicos según su edad.
- Controlar los contenidos que los niños consumen.
- Fomentar el uso de la pantalla con provecho.
- Incentivar juegos a la intemperie en familia.
- Cumplir una rutina de deporte o cualquier otra actividad extracurricular.
- Usar el teléfono en ambientes comunes de la casa para vigilar mejor lo que ven.
- No usar el móvil como niñera.
Efectos negativos del uso del celular
Las consecuencias del abuso del móvil en niños pequeños son diversos y se manifiestan en muchos aspectos de su desarrollo físico, mental y emocional.
- Alteración del desarrollo cerebral. Mayormente en niños menores de 2 años, cuyas conexiones neuronales están aún en formación.
- Alteraciones en el sueño. El uso de pantalla dos o tres horas antes de dormir puede provocar falta de sueño y por consiguiente generar dolores de cabeza, problemas de concentración en los estudios e irritabilidad.
- Aislamiento social. Los pequeños se aíslan de su entorno social. El uso sin control del móvil puede generar dificultad para relacionarse con otros pares o para adaptarse a diferentes entornos.
- Obesidad infantil. Ya que se el uso de pantallas promueve el sedentarismo.
- Déficit visual. La exposición continua a las pantallas de los celulares a temprana edad puede provocar problemas como miopía o astigmatismo.