En el Día Mundial de la Informática, celebrado cada 9 de diciembre, se destaca la urgente necesidad de que los colegios actualicen sus métodos de enseñanza para alinearse con la realidad digital. La tecnología en el proceso de aprendizaje.
Hoy más que nunca, la tecnología es una herramienta clave en el proceso de aprendizaje, y es fundamental que los centros educativos apoyen a los estudiantes en el desarrollo de habilidades digitales, desde la primaria hasta la secundaria. Día Mundial de la Informática: estrategias para acercar a los niños al aprendizaje de herramientas digitales.
Métodos
Según Carlos Luna, Asesor del Área de Ciencias de la Computación y Responsable de Innovación Tecnopedagógica del Colegio de la Inmaculada, en un mundo cada vez más digitalizado, las escuelas no pueden quedarse atrás. «Los colegios deben adaptarse a los avances tecnológicos, no solo enseñando a los estudiantes a usar herramientas digitales, sino ayudándolos a entender cómo aplicarlas de forma segura, creativa y responsable. Tenemos el compromiso de transformar nuestros enfoques pedagógicos y avanzar hacia un modelo integral que logre un equilibrio entre el desarrollo de habilidades técnicas y la formación de ciudadanos responsables».
Respecto a ello, el experto brinda algunos aspectos clave para facilitar a los niños el aprendizaje de las herramientas digitales en las escuelas con métodos prácticos y efectivos, que no solo mejoran sus habilidades tecnológicas, sino que también fomentan su creatividad y pensamiento crítico:
Incorporar programación desde temprana edad. Los niños pueden empezar a aprender desde la primaria, desarrollando habilidades como la resolución de problemas y el pensamiento lógico. Aquellos que aprenden a programar desde pequeños, desarrollan habilidades críticas para enfrentar los desafíos tecnológicos del futuro. Actividades como la creación de juegos o la programación de robots de piso son una excelente forma de fomentar la creatividad y el interés por la tecnología.
Educación en ciberseguridad: La formación de los niños debe incluir temas como la detección de las amenazas existentes en línea a sus datos personales. Se pueden desarrollar dinámicas como talleres interactivos que simulen escenarios reales para que comprendan la importancia de la seguridad digital de manera práctica y atractiva. Esto protege a los estudiantes y los empodera para navegar con confianza en el entorno digital.
Tecnología en proyectos colaborativos: El trabajo colaborativo es uno de los pilares del entorno laboral moderno, y las herramientas tecnológicas pueden potenciarlo desde la escuela. Plataformas como Google Workspace, combinadas con aplicaciones de realidad aumentada, hacen que los proyectos sean más dinámicos e inclusivos. “Por ejemplo, a través de esta metodología, los estudiantes del Colegio de la Inmaculada desarrollan habilidades técnicas, aprenden a comunicarse y resolver problemas en equipo, fomentan su creatividad y se preparan para desafíos profesionales futuros”, comenta Luna.
Clases interactivas con realidad virtual: El aprendizaje inmersivo es una tendencia en auge que está transformando la educación. Desde visitar la antigua Roma hasta explorar el cuerpo humano en 3D, la realidad virtual hace que materias complejas sean comprensibles y emocionantes. Esta tecnología permite a los menores experimentar situaciones difíciles de replicar en un aula tradicional, aumentando el interés y la retención de conocimientos
Estimular la creatividad con tecnología maker. Los laboratorios de creación y fabricación digital están cambiando el panorama educativo. Los niños pueden interactuar directamente con la tecnología, construir sus propios artefactos digitales y aprender de sus errores. Este tipo de aprendizaje fomenta la innovación y prepara a los estudiantes para resolver problemas reales de la sociedad. La tecnología en el proceso de aprendizaje.
“La educación debe constar de un entorno seguro, donde los escolares se sientan motivados a crear, innovar y encontrar soluciones a problemas prácticos. Este enfoque fomenta la autonomía y el espíritu emprendedor, valores imprescindibles en la sociedad actual”, finaliza Carlos Luna.
Integrar recursos digitales desde temprana edad es una necesidad para que los estudiantes se conviertan en ciudadanos innovadores y preparados para el futuro. Las escuelas peruanas deben ser capaces de enseñar a usar la tecnología, así como a desarrollar el pensamiento crítico. De esta manera, el país formará a las nuevas generaciones con las competencias necesarias para sobresalir en un mundo cada vez más tecnológico.