La comercialización de vehículos nuevos viene mostrando durante los primeros nueve meses del presente año resultados positivos en casi todos sus segmentos, a excepción de los vehículos menores, así lo señaló Alberto Morisaki, gerente de Estudios económicos y Estadística de la Asociación Automotriz del Perú (AAP) tras anotar que, de acuerdo a la tendencia de los últimos meses, es muy probable que la venta de estos vehículos continue registrando un comportamiento similar al observado en lo que va del año. Compra de vehículos nuevos cierra setiembre con resultados dispares.
Por un lado, dijo, las ventas de vehículos livianos y pesados cerrarán el 2022 con resultados positivos, aunque la tasa de crecimiento durante los siguientes meses continuaría reduciéndose, “influenciados por un menor dinamismo de la demanda interna, particularmente del consumo privado, y por el progresivo deterioro de las expectativas empresariales y confianza del consumidor”.
AAP: Compra de vehículos nuevos cierra setiembre con resultados dispares
Por otra parte, anotó, la venta de vehículos menores terminará el año con una caída de dos dígitos, por una normalización de la demanda. “Sin embargo, al analizar el comportamiento tendencial de dicha variable se puede apreciar que la tasa negativa de crecimiento habría tocado fondo, por lo que se esperaría que en los siguientes meses la caída no se profundice o que incluso sea menor”, apuntó.
Según cifras de la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos – SUNARP, la venta de vehículos livianos llegó a 14,863 unidades en setiembre de 2022, con lo cual las ventas acumuladas entre enero y setiembre del 2022 se ubicaron en 120,026 unidades, registrando un crecimiento de 7.5% en comparación con similar periodo del año anterior.
Al desagregar la información por sub-segmento, se puede apreciar que el rubro con más unidades vendidas fueron las SUV con 53,209, cifra mayor en 20.6% a tasa anual. Del mismo modo, las ventas de pick up y furgonetas se situaron en 24,111 unidades (+12.5%), mientras que las de camionetas llegaron a 14,383 unidades (+6.2%). En tanto, las ventas de automóviles retrocedieron a 28,323 unidades (-13.0%). “Vemos que, el desempeño de las ventas de vehículos livianos continuó siendo sostenido por el consumo privado y de algunos indicadores del mercado laboral”, refirió Morisaki al tiempo de señalar que, como indicara anteriormente, en el comportamiento tendencial -medido a través de las ventas acumuladas de los últimos 12 meses- se evidencia una desaceleración, la cual se debería a una ralentización de la demanda interna a partir del tercer trimestre.
Por su lado, la venta de vehículos pesados mostró avances en todos los segmentos que lo componen. En el caso de camiones y tractocamiones, las ventas llegaron a 1,325 unidades en setiembre último, llevando las ventas en lo que va del año a 11,815 unidades, incrementándose en 4.5% respecto a los primeros nueve meses del 2021. “El resultado positivo de este rubro es impulsado por el dinamismo de los sectores económicos que usan intensivamente estos bienes de transporte, como la construcción, minería, manufactura no primaria y comercio al por mayor, y por la mayor circulación de vehículos por todas las carreteras del país debido al levantamiento de todas las restricciones de tránsito en el presente año, facilitando el transporte de bienes y mercancías”, acotó el economista.
Del mismo modo
La comercialización de minibús y ómnibus sumaron 215 unidades en el noveno mes del 2022, por lo que las ventas contabilizadas entre enero y setiembre del presente año saltaron a 1,935 unidades, 46.0% más que hace un año. “En este caso concreto, el fuerte repunte que vemos, estuvo influenciado por la recuperación de sectores que venían rezagados durante la pandemia, como transporte urbano e interprovincial, turismo y entretenimiento, los cuales fueron duramente golpeados por los toques de queda y restricciones de movilidad, pero que en el 2022 muestran un importante dinamismo tras el levantamiento de estos”, indicó. Compra de vehículos nuevos cierra setiembre con resultados dispares.
En cuanto a la venta de vehículos menores, ésta totalizó 33,348 unidades en setiembre último, mientras que en los primeros nueve meses del año la comercialización se sitúo en 281,363 unidades, retrocediendo en 13.7% respecto a igual lapso del 2021. “Al desagregar la cifras, se observa que las ventas de motos llegaron a 196,752 unidades en el periodo de análisis (-12.7%) debido a un ajuste de la demanda, tras el significativo avance obtenido en el 2021; de igual manera, la eliminación de las restricciones de movilidad así como el avance de la campaña de vacunación contra el Covid-19 han permitido que la circulación de personas se incremente y hagan un mayor uso del transporte público y privado, con lo que la demanda por servicios de entrega a domicilio y delivery, los cuales son ofrecidos principalmente a través de motocicletas, vaya normalizándose”, apuntó. En tanto, las ventas de trimotos se situaron 84,611 unidades en enero-setiembre de 2022, retrocediendo en -16.1% respecto a similar lapso del año anterior.
Al referirse a lo que sucederá en el futuro
Morisaki, señaló que además de las perspectivas negativas de variables claves de la economía local, señaladas líneas arriba se deben considerar algunos factores de riesgo en el radar para las ventas de vehículos nuevos. Entre los más importantes están el recrudecimiento del conflicto entre Rusia y Ucrania, que nuevamente generaría inestabilidad geopolítica en dicha región, trayendo consigo una serie de complicaciones para la economía mundial como el aumento de las presiones inflacionarias en bienes importados tales como materias primas agrícolas y combustibles; y el deterioro de las expectativas de crecimiento global. Del mismo modo, a nivel interno, la escasez de fertilizantes empujó al alza los precios de los productos agrícolas durante setiembre último, por lo que si las autoridades no atienden eficientemente dicho problema, la inflación podría empezar a repuntar nuevamente, encareciendo el costo de vida en el país y perjudicando a las familias con menos recursos, afectando la adquisición de bienes duraderos como vehículos. Asimismo, al alza del costo del financiamiento es otro de los factores que tendría implicancias en las decisiones de compra de vehículos por parte de las familias.