Saludamos la rápida respuesta de las autoridades del MINEDU construyendo en tiempo record un régimen académico excepcional y temporal. FIPES se pronuncia sobre educación virtual en Universidades Privadas.
Los estudiantes se han visto obligados a adaptarse a los entornos on-line, unos con más limitaciones que otros y miran con recelo las pensiones educativas.
Perú: FIPES se pronuncia sobre educación virtual en Universidades Privadas
Saludamos la rápida respuesta de las autoridades del MINEDU construyendo en tiempo record un régimen académico excepcional y temporal para aplicar la educación no presencial -que ha evitado la parálisis de los aprendizajes de cara a la pandemia que viene afectando a todos los actores del sistema educativo.
Los estudiantes se han visto obligados a adaptarse a los entornos on-line, unos con más limitaciones que otros y miran con recelo las pensiones educativas asumiendo, equivocadamente como verdad absoluta, que la virtualidad es menos costosa que la tradicional educación presencial. Los docentes enfrentan una situación retadora que están asumiendo con responsabilidad pero también enfrentan una situación inestable en sus puestos y remuneraciones y, las instituciones de educación superior, que recientemente han pasado por procesos de licenciamiento onerosos, deben asumir ahora los costos de la virtualización adquiriendo plataformas digitales adecuadas, capacitando a sus docentes y ayudando a sus alumnos con herramientas tecnológicas y facilidades en las pensiones, todo ello con el compromiso de sostener la continuidad educativa y en un escenario de evidente reducción de sus ingresos por la disminución de la matrícula.
Como consecuencia
De los procesos de licenciamiento, aún inconclusos, permanecen en el sistema de educación superior universitario cien (100) casas de estudio, aproximadamente, distribuidas en similar proporción entre públicas y privadas. En solo siete (7) universidades privadas de Fipes -encuestadas hasta el momento-las cifras arrojan un importante grupo de ciento diecisiete mil (117,000) estudiantes del nivel C y D y veinte mil (20,000) docentes y administrativos, impactados por una reducción de la matrícula que supera el 15 % con tendencia al alza por las deserciones y retiros que ya se están presentando. Estimamos que la afectación del COVI-19 puede llegar a 300,000 estudiantes universitarios.
Frente a este complicado panorama, creemos necesario abordar la crisis siguiendo la misma dimensión de su afectación, es decir, considerando a todos y cada uno de sus actores: estudiantes, padres de familia, docentes y universidades.
Como consecuencia de ello, Fipes propone aceptar la virtualidad como una modalidad de aprendizaje indiscutible del siglo XXI con el compromiso del Estado para que:
- Fomente las bondades de la educación no presencial y mejore el marco regulatorio respectivo.
- Fortalezca Beca 18 para ayudar a los estudiantes de los quintiles más afectados mediante un ambicioso programa que supere los recursos invertidos hasta hoy.
- Implemente préstamos estudiantiles con interés blando que permita la continuación educativa.
- Coordine con los operadores de telecomunicaciones la creación de tarifas de internet universitarias a bajo precio que facilite el acceso educativo a los jóvenes de provincias alejadas y de bajos recursos.
- Realice acciones preventivas e integradoras en la supervisión de las actividades no presenciales, propias del inicio de una modalidad de aprendizaje nunca antes implementada de manera tan rotunda y generalizada.
- Establezca medidas para el retorno gradual de estudiantes para clases prácticas y de laboratorio con los protocolos sanitarios del caso.
Creemos que estas medidas ayudarán directamente a los estudiantes y, en cadena, a los docentes, trabajadores administrativos y universidades. Chile ha implementado un plan de acción para las instituciones de educación superior que puede servir como referencia para nuestro país.
Reiteramos, el inesperado COVID-19 ha afectado transversalmente nuestro sistema educativo, perjudicando a todos sus actores. Antes que miradas individuales que originan posiciones encontradas o irreconciliables, propiciamos una respuesta concertada de los miembros de la comunidad universitaria sobre la base de un propósito mayor: el principio del interés superior del estudiante.