La tecnología ha avanzado a pasos agigantados, pero, ¿es hoy un sector diverso e inclusivo? Laboratoria celebra 10 años de empoderamiento tecnológico para mujeres en América Latina.
A 10 años de la fundación de Laboratoria, organización de impacto social que busca insertar a más mujeres en tech, se ve que hay desafíos persistentes que impiden a las mujeres disfrutar de igual manera los beneficios del rubro.
Fundación: Laboratoria celebra 10 años de empoderamiento tecnológico para mujeres en América Latina
De acuerdo a ONU Mujeres, en los últimos diez años los países de renta baja y media han perdido 1 billón de dólares de su PIB por excluir a las mujeres del mundo digital, una pérdida que podría aumentar hasta 1,5 billones de dólares en 2025.
Una década en el mundo tecnológicopuede parecer mucho tiempo, sobre todo si se considera el acelerado ritmo al cual avanza. Sin embargo, para Laboratoria, 10 años significan mucho más que un simple lapso. En este periodo, la organización ha sido testigo y protagonista de la transformación del panorama tecnológico en América Latina, al desafiar las barreras de género y trabajar incansablemente para empoderar a las mujeres en este campo en constante evolución.
A través de bootcamps de alto nivel, han preparado a mujeres en busca de una mejor oportunidad profesional para comenzar carreras como desarrolladoras web, diseñadoras de experiencia de usuario y analistas de datos, con un énfasis en habilidades para la vida y el auto-aprendizaje. Al finalizar los programas de formación, las han acompañado en su búsqueda laboral en diversas empresas con necesidad de talento en tecnología.
“A pesar de que se ha hablado mucho de inclusión, la industria tech a despriorizado políticas a favor de las mujeres en tecnología en los últimos años. Es urgente abordar la brecha de género ahora junto con las empresas y la sociedad, y no podemos retroceder en los compromisos que hemos logrado”, explica Gabriela Rocha, CEO y cofundadora de Laboratoria.
Educación y empleabilidad: un desafío continuo
A pesar de que en los últimos años hemos visto la evolución de nuevas herramientas y soluciones digitales, hay aspectos en los que la industria tech sigue estancada: la participación de las mujeres en este sector aún está lejos de ser igualitaria. En América Latina la cantidad de mujeres que trabajan en TI es sólo de un 23%, de acuerdo a un estudio de IT Talent de 2023.
Por ello, desde sus inicios en 2014, Laboratoria nació para impulsar a mujeres que sueñan con un futuro mejor a comenzar y crecer una carrera transformadora en tecnología. A la fecha, la edtech -que comenzó con un piloto de 15 mujeres en Lima, Perú- ha graduado a más de 3.800 mujeres y tiene presencia en 11 países latinoamericanos. Sin embargo, a medida que la organización celebra su décimo aniversario, se enfrenta a nuevos desafíos y presenta una estrategia renovada para alcanzar su visión de una economía digital más diversa, inclusiva y competitiva.
«Nuestra visión como organización es ambiciosa y apunta a generar cambios profundos en el sector que abran oportunidades para más mujeres, transformando el rostro de la industria y acortando la brecha de género», afirma Rocha.
Para alcanzar esta visión, Laboratoria ampliará su alcance más allá de ser únicamente un bootcamp. Aunque estos programas han logrado una tasa de empleabilidad de más del 77% para sus egresadas, la organización reconoce la necesidad de abordar a un mayor número de mujeres interesadas en la tecnología. Por lo tanto, se enfocará en productos que atiendan a mujeres en todo su trayecto profesional.
Nuevos enfoques
Uno de los productos que se fortalecerá será Código M, que apunta a ese gran porcentaje de mujeres que quieren saber más de las oportunidades del mundo tech pero que aún no saben cómo empezar. Por otro lado, también se enfocarán esfuerzos en Laboratoria+, comunidad de aprendizaje para mujeres que ya tienen una carrera pero que necesitan de más herramientas para llegar a roles de liderazgo. Con estas dos direcciones, se reforzará la trayectoria completa de las mujeres.
“Nuestro bootcamp ha tenido la capacidad de atender a aproximadamente un 10% de las mujeres que postulan. Entonces nos preguntamos: ¿qué pasa con ese 90% de mujeres interesadas en tech? Hoy tenemos una visión integral de carrera en tecnología, que va desde la capacitación inicial hasta el desarrollo de líderes senior en distintas industrias”, comenta Rocha, quien lidera la implementación de esta nueva estrategia. Laboratoria celebra 10 años de empoderamiento tecnológico para mujeres en América Latina.
Tras 10 años de trayectoria, la organización también ha aprendido cómo ayudar a forjar entornos laborales que promuevan la diversidad, donde las mujeres puedan llegar lejos. Por ello, y para darle continuidad a la agenda femenina más allá de marzo, destacará el trabajo que han hecho distintos actores que aportan al cierre de la brecha de género en tech. A través de LITA -Latam Inclusive Tech Awards- Laboratoria premiará a empresas, equipos y personas que estén haciendo una diferencia. Las postulaciones a los premios se abrirán próximamente. Laboratoria celebra 10 años de empoderamiento tecnológico para mujeres en América Latina.
A través de esta nueva hoja de ruta, Laboratoria reafirma su compromiso de ser el destino para el talento tech femenino en América Latina, conectando a diversos actores interesados en cerrar la brecha de género en la industria tecnológica.
Acerca de Laboratoria
Laboratoria trabaja para impulsar a las mujeres de Latinoamérica que quieren desarrollar su potencial en la industria digital. Hacemos esto a través de una oferta de programas diseñados para abrir oportunidades transformadoras que les permitan encontrar su lugar en el sector. Somos el destino para el talento tech femenino de Latam, conectando a diferentes actores que buscan contribuir al cierre de la brecha de género y así tener una economía digital más diversa, inclusiva y competitiva. Más mujeres trabajando en tecnología significa más mujeres construyendo el futuro de nuestra región.
Con 10 años de trayectoria y presencia en más de 11 países de Latinoamérica, la organización ha impactado a más de 3.800 mujeres a través de sus bootcamps en habilidades técnicas y para la vida, más de 5.000 han participado en eventos y talleres introductorios de Código M, y más de 600 mujeres son parte de la comunidad de liderazgo femenino de Laboratoria+. Con nuestro trabajo buscamos revertir las desigualdades a las que se enfrentan las mujeres para acceder a empleos de calidad en la economía digital de Latinoamérica y ayudamos a todo tipo de organizaciones -desde grandes corporaciones hasta startups de tecnología y consultoras de software- a encontrar el talento técnico femenino que necesitan y a promover el crecimiento de más mujeres en sus equipos.
Gabriela Rocha, cofundadora y CEO de Laboratoria
Gabriela es cofundadora y CEO de Laboratoria, organización que impulsa a mujeres en busca de un futuro mejor a comenzar y crecer una carrera en tecnología. Con presencia en Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay, Laboratoria trabaja para lograr una economía digital más diversa, inclusiva y competitiva, que abra oportunidades para que cada mujer pueda desarrollar su potencial. Antes de lanzar Laboratoria en México, Gabriela trabajó como consultora de políticas públicas en la Ciudad de México, y dirigió proyectos de desarrollo en las favelas de Río de Janeiro y en los Andes Peruanos. En el 2017 fue seleccionada como una de las Rising Talents del International Women’s Forum. Tiene un bachiller de Psicología de Boston College y una Maestría en Administración Pública y Desarrollo Internacional de la Universidad de Columbia en Nueva York.
Mariana Costa Checa, cofundadora de Laboratoria+
Mariana es apasionada por equiparar la cancha para las mujeres en diversos frentes. Es cofundadora de Laboratoria+, una comunidad de desarrollo profesional para impulsar el crecimiento de más mujeres a roles de liderazgo en toda América Latina. Antes comenzó Laboratoria, organización que forma a mujeres para trabajar en el sector de la tecnología y avanzar la diversidad en la industria. Tiene un Bachiller en Relaciones Internacionales de LSE y una maestría en Administración Pública en la Universidad de Columbia.