El centro poblado es un anexo del distrito de Cuenca, en la provincia de Huarochirí, en el departamento de Lima. Conoce ‘Lanchi’, la comunidad peruana que resurgió de la mano de la extracción de arcilla.
Cerámica San Lorenzo fue la primera compañía privada que llegó a la zona e invirtió en su materia prima, la arcilla, desde hace más de 15 años.
La comunidad peruana que resurgió de la mano de la extracción de arcilla
Lanchi es una comunidad que forma parte de la provincia de Huarochirí y está situada en la parte centro oriental del departamento de Lima. De acuerdo con el último censo realizado por el INEI*1 en el país durante octubre del 2017, es un centro poblado de una región natural quechua que está ubicado a más de 3 mil metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m) y cuenta con 144 pobladores censados.
Hoy Lanchi es “una comunidad en potencia”, en palabras de sus propios pobladores. Durante las últimas décadas supo apalancarse en la inversión privada que llegó a su zona para reinventar su economía local, mejorar su calidad de vida y hasta salvaguardar sus actividades agrícolas con la autoconstrucción de represas que les permiten continuar con sus sembríos en épocas de sequía. ¿Cómo logró Lanchi impulsar este desarrollo? Mirando a la inversión privada como una oportunidad.
En los alrededores de esta comunidad, que se encuentra a cuatro horas de Lima, la compañía de revestimientos Cerámica San Lorenzo desarrolla una de sus seis actividades de minería no metálica ni contaminante en el Perú, a través de la extracción de arcilla en su cantera de nombre ‘Gloria María’. De allí obtiene arcilla blanca y roja que luego de reposar en las canchas de almacenamiento viaja hasta su planta de Lurín para convertirse en piezas cerámicas que recubren pisos y paredes del Perú y el mundo.
Cuando recibieron al primer grupo de trabajadores, en Lanchi observaron que esta actividad les abría las puertas a la rotación de un mayor número de personas externas a su comunidad que por su estilo de trabajo necesitarían de acceso a la telefonía celular para una comunicación fluida, mejores carreteras, resguardo policial y más. Ya no estaban solos, sino que contaban con el aval de una gran inversión que se quedaría en la zona durante más de 20 años para buscar ampliar los recursos básicos que se tenían en su localidad.
Organizados empezaron a generar alianzas estratégicas con la empresa recién llegada y autoridades locales de su distrito y provincias para que inviertan en su propia jurisdicción. Con el paso de los años extendieron su proyección al Gobierno central y otras compañías que tuvieran el interés de promover el desarrollo en zonas rurales del país, así como en usar los recursos de su geografía rica en arcilla, la cual empezó a despertar el interés de más empresas del sector. Con la autogestión de sus líderes comuneros hoy cuentan con señal telefónica de última generación (4G), un puesto policial que está al servicio de comunidades aledañas evitando viajes de hasta cinco horas para llegar hasta la comisaría de Cieneguilla, posta de salud, agentes bancarios, servicio de agua potable y riego tecnificado en las estaciones de almacenamiento hídrico que ellos mismos crearon.
Alianzas y mirada a largo plazo
La primera compañía en establecer una conexión con los pobladores de Lanchi fue Cerámica San Lorenzo, empresa de revestimiento que desde hace más de 15 años apostó por la zona para obtener su materia prima principal. De la mano con el diálogo estableció una relación respetuosa y genuina con la comunidad, su cuidado ambiental; así como desarrollo agrícola y ganadero.
Desde su llegada y a largo del tiempo ha aportado en la construcción, mejoramiento y mantenimiento de tramos de carreteras y vías de acceso que conectan a Lanchi con otras zonas rurales y urbanas. También ha estado presente en sus festividades, en el desarrollo de sus proyectos comunales y como nexo de soporte para el acercamiento a instituciones que brindan acceso a servicios básicos como la comunicación móvil.
La apuesta más grande ha sido el aporte para la construcción de las represas diseñadas por la comunidad para almacenar el agua generada por la lluvia a fin de tener con qué trabajar sus sembríos y ganaderías durante todo el año, incluso en las épocas de sequía. Este proyecto que hoy consta de siete presas, algunas aún por concluir, lo acompañan desde sus inicios brindándoles horas máquina de volquetes, materiales de construcción como arena, tuberías y piezas de revestimiento. Esto además del acompañamiento y escucha activa. Conoce ‘Lanchi’, la comunidad peruana que resurgió de la mano de la extracción de arcilla.
“La inversión privada puede traer mucho progreso en nuestros pueblos, pero hay que saber aprovecharla y sentarse a dialogar. Pensar a largo plazo”, detallan los pobladores. En la actualidad, en Lanchi no solo existe una mejor infraestructura y dinámica en las actividades económicas, sino que también ha crecido la proyección de vida de parte de sus poblaciones más jóvenes al contar con un localidad con recursos bases, fuentes de trabajo y proyección de seguir creciendo.
Acerca de Cerámica San Lorenzo
Empresa líder en la producción de revestimientos cerámicos. Pertenece al grupo mexicano Lamosa, uno de los fabricantes de cerámica más grandes del mundo, que cuenta con 19 plantas de producción y actualmente es la compañía líder de su sector en latinoamérica e integra el TOP 2 a nivel internacional. Cuentan con más de 130 años de experiencia en el mercado, marcando tendencias en revestimientos alrededor del mundo.
En Perú, San Lorenzo cuenta con tres plantas de producción y una planta de piezas decorativas. La principal está ubicada en Lurín y emplea a más de 700 personas. A nivel nacional, cuenta con un amplio y destacado portafolio que combina historia, tecnología e innovación con productos de la más alta calidad y belleza, en una amplia gama de cerámicos, gres porcelánico, porcelanatos, entre otros.
Para mayor información visite:
https://sanlorenzo.com.pe/proyectos/
*1 Fuente: INEI (2017). Directorio nacional de centros poblados, tomo 4. Disponible en
